FANTA: aunque usted no lo crea, un invento de la Alemania nazi

Escribe: Julio A. Benítez (benitezjulioalberto@gmail.com)       

“Si te dijéramos que fue en Alemania, en 1941, donde se inventó la marca “FANTA” … ¿Lo creerías?

En 1929, el presidente director de la empresa “Coca-Cola Export Company S.A.”, Robert Woodruff, desde la central en Atlanta (E.E.U.U.), decidió instalar en Alemania la fabricación de su ya famosa gaseosa y encargó a su compatriota Ray Powers, residente en dicho país, para que dirigiera todo lo concerniente a la instalación de la primera planta en ese territorio, que, en las Olimpíadas de Berlín 1936 fue su principal espónsor.

En marcha el proyecto y ya con 43 productoras de la gaseosa en ese país, se llegaron a vender 5 millones de botellas por año hasta el 7 de diciembre de 1941, cuando Japón bombardeó la base militar estadounidense de Pearl Harbor (Puerto de Perlas en castellano) ubicada en las islas Hawái.

Por este motivo, E.E.U.U. declaró la guerra el Eje (Alemania, Japón e Italia), y el jarabe secreto para la fabricación de Coca-Cola, por la lógica situación, también, de la ruptura de relaciones comerciales, no llegó más a las plantas alemanas.

Creatividad germana

Para evitar el cierre de tantas fábricas con miles de obreros y empleados, el nuevo director de esas plantas, Max Keith, intentó la fabricación de una nueva bebida con los ingredientes disponibles, mezclando fibra de manzana, subproducto de la fabricación de la sidra y suero de leche, subproducto de la fabricación de queso y otros ingredientes posibles de adquirir.

Realizadas las primeras pruebas y degustaciones, en una reunión de los trabajadores, uno de ellos, Joe Knipp, el vendedor más antiguo de Coca-Cola, exclamó en voz alta “FANTASTISCH” (Fantástico en castellano).

Y entre todos decidieron utilizar las primeras cinco letras de esa palabra, creándose así la nueva bebida gaseosa “FANTA”, que fue envasada en botellas cuya formas y capacidad de contenido fueron diseñadas por ellos mismos.

La inestabilidad de la guerra hizo que el gusto cambiara en algunos momentos por la escasez de los subproductos citados, pero de cualquier forma vendieron unos tres millones de botellas por año, cantidad que se fue incrementando a medida que el ejército nazi invadía otras naciones, primero fue Polonia, después Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, parte de Francia y Europa Occidental, hasta donde fue llegando “FANTA”, “Made in Alemania”.

Fanta Naranja

Al finalizar la guerra en 1945, con la derrota del ejército nazi, todo volvió a la normalidad y los alemanes dejaron de fabricar su gaseosa por diez años. Hasta que, en el año 1955, la subsidiaria de la emblemática Coca-Cola ubicada en Nápoles decidió producir un nuevo producto acorde con la tradición cítrica de la región, con gusto a naranja, y entonces compró a sus creadores germanos la marca “FANTA”.

Como dato anecdótico es interesante destacar que Joseph Goebbels, mano derecha de Adolfo Hitler, estuvo buscando la forma de apoderarse de la fórmula secreta del jarabe, contratando espías con ese objetivo, pero no pudo concretar su deseo, que tenía el fin de nacionalizar las 43 fábricas instaladas en el territorio de la Alemania nazi y de los países invadidos, pero el triunfo de los aliados abortó esas intenciones.

Para todos los gustos

En estos momentos, “FANTA” se vende en todo el mundo, con más de 90 gustos distintos, según el país donde se la fabrique, entre otros, de durazno o melocotón, guaraná, uva, manzana, pera, fresa, kiwi, lima, limón, gaúco, lichi, piña, zero limón y zero naranja, sandía, aloé vera, melón, Bamboocha (con flores silvestres), zapallo, jalea y frutilla.

Por otro lado, existen estudios de laboratorios internacionales que indican que el E104 o amarillo de quinoleína, que colorea esa bebida, incrementa la hiperactividad de los niños y les puede producir dermatitis”.

Fuente: Libro “Historias asombrosas de la Segunda Guerra Mundial”, del historiador, periodista, profesor de historia y geografía en la Universidad de Barcelona (España) don Jesús Hernández Martínez (54 años).

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