“Es noche de luna llena y un aullido se escuchó”
Escribe: Leo Muñoz
En 1975, Leonardo Fabio dirigió la película “Nazareno Cruz y el lobo”, que narraba la historia de un joven séptimo hijo varón al que el diablo convertía en lobizón (o lobisón).
Los hombres lobos son nutrimento de leyendas en gran parte del mundo. Los séptimos hijos varones de hermanos varones e hijos de los mismos padres se convertían indefectiblemente en lobizones, se emperraban los viernes a la medianoche, algunos agregan los martes, o que sólo con luna llena o en noches claras. Si el caso similar era de hermanas mujeres, la séptima hermana se convertiría en bruja.
Señala el sitio “Destino San Juan”: “Dicen nuestros paisanos que el hombre lobo se lo puede reconocer los días sábados porque sufre fuertes dolores de estómago y su olor es insoportable, ya que el viernes a la noche vagó por los basurales, se revolcó en las osamentas, comió carne podrida, engulló algún niño sin bautizar y atacó a cuanto caminante encontró”.
Agrega la misma fuente: “También dicen que lo vieron largando fuego por los ojos y la boca. En Chaco dicen que es un perro negro grande, sin cabeza, o si la tiene luce una oreja corta y una larga hasta el piso. Que arrastra cadenas y produce tanto terror su presencia que los perros gimen y se esconden al solo olfatearlo”.
En la mitología guaraní Luisón (lobisón) era el séptimo hijo de Tau y Keraná, cargando una maldición que castigaba a sus padres. Supuestamente algunas familias sacrificaron séptimos hijos para liberarlos de la maldición.
Lobo de crin y cuarteto
El aguará guazú (del guaraní “zorro grande”) o lobo de crin, es un cánido autóctono de Sudamérica, es una especie protegida, es carnívoro, pero no representa peligro para el hombre ni el ganado. Su figura es la inspiradora de la leyenda del lobizón.
El “Cuarteto Característico Leo” es la cuna del cuarteto, con el piano de Leonor Marzano y su padre, los que en la década del 40 comenzaron la creación del característico ritmo de Córdoba, en los 60 comienza a ser bailado y escuchado en la “Docta”, ya que primeramente era recibido en fiestas familiares y rurales.

Con 15 años Carlitos “La Mona” Jiménez se incorporó como cantante al “Cuarteto Berna”, luego pasó al “Cuarteto de Oro” con su tío Coquito Ramaló.
“La gaita del lobizón” sería su éxito más importante, otro recordado tema es “Cortate el pelo cabezón”. En 1984 con 33 años, “La Mona” inició su carrera solista.
El resto es historia.
“La Gaita del Lobizón” (Cuarteto de Oro)
Con yuyos una brujita
Un mejunje preparó,
Transformando un guachito
En un terrible lobizón.
Es noche de luna llena
Y un aullido se escuchó,
Y las mozas temblaron todas
Porque ahí viene el lobizón.
Que te come, que te come,
Que te come el lobizón
Que te agarra, que te abraza,
Te destroza el lobizón.
La risa de aquella bruja
Un día se desató,
Y el lobizón medio loco
Casi, casi lo mató.
Las mozas del triste pago
Temblaron por la emoción,
De verse una noche a solas
Con el malo lobizón.
Que te come, que te come,
Que te come el lobizón
Que te agarra, que te abraza,
Te destroza el lobizón.
De una moza de ese pago
El mozo se enamoró,
Y el hechizo por encanto
Pronto se le pasó.
En noche de luna llena,
Con la moza se encontró
Y la bruja entrometida
En lobizón lo transformó.
Que te come, que te come,
Que te come el lobizón
Que te agarra, que te abraza,
Te destroza el lobizón.