[Historias] ¡Está que se parte! África quedará dividida en dos por una gran grieta

Sí, ese continente donde se teoriza que empezó la historia de nuestra especie y cuya gran extensión –al menos una parte considerable- quedó atrapada y olvidada en el tiempo (junto a sus habitantes), será nuevamente protagonista de otro nacimiento espectacular, y esta vez surgirá desde lo más profundo de sus entrañas.

Escribe: JULIO A. BENÍTEZ – benitezjulioalberto@gmail.com

Es que el “Continente Negro” se está partiendo lenta pero inexorablemente, lo que hará que África se divida en dos y generará un nuevo océano, así lo confirmaron científicos de varios países, basados en nuevas mediciones satelitales.

La clave de este descubrimiento fue el hallazgo, en 2005, de una grieta profunda de cientos de kilómetros a lo largo de un tramo árido de la región de Afar, en el Oriente del continente, y que, al pararse en el lugar exacto, las profundidades subterráneas marcan esa división.

Esta desolada extensión se asienta sobre la unión de tres placas tectónicas que se separan muy lentamente, un complejo proceso geológico que, según los científicos, eventualmente dividirá África en dos y creará una nueva cuenca oceánica, dentro de millones de años.

Desde hace varias décadas se estudia el destino tectónico de este continente, pero las nuevas mediciones satelitales están ayudando a los científicos a comprender mejor la transición y ofrecen herramientas valiosas para analizar el nacimiento gradual de un nuevo océano en uno de los lugares geológicamente únicos del planeta.

“Este es el único lugar en la tierra donde puedes estudiar cómo la grieta continental se convierte en una grieta oceánica”, dijo Christopher Morre, Ph.D., estudiante de doctorado en la Universidad de Leeds en el Reino Unido, que ha estado trabajando con un radar satelital para monitorear la actividad volcánica en África Oriental, que está asociada con la ruptura del continente.

Se cree que el nuevo océano tardará entre 5 y 10 millones de años en formarse, pero la ubicación fortuita de la región Afar en los límites de las placas de Nubia, Somalia y Arabia, lo convierte en un laboratorio único para estudiar procesos tectónicos elaborados.

La corteza terrestre está formada por una docena de dichas de dichas placas tectónicas grandes, que son lozas de forma irregular, que, constantemente se aplastan, trepan, se deslizan o se separan unas de otras.

Durante los últimos 30 millones de años, la placa árabe se ha alejado de África, un proceso que creó el Mar Rojo y el Golfo de Adén, entre las dos masas de tierra conectadas. Pero la placa somalí en África oriental también se extiende lejos de la placa de Nubia, separándose a lo largo del Valle del Rift (África Oriental), que se extiende a través de Etiopía y Kenia.

Satélites y GPS

Pero todavía hay algunas grandes incógnitas, incluida la causa de que el continente se separe, dado que algunos estudiosos del tema piensan que una columna masiva de rocas sobrecalentadas, que se elevan del manto debajo del África Oriental, podría estar impulsando la grieta continental de la región.

“En los últimos años, los instrumentos GPS han revolucionado este campo de investigación, permitiendo a los científicos realizar mediciones precisas de cómo se mueve el suelo a través del tiempo”, -aseguró Ken Macdonald- un científico marino y profesor emérito de la Universidad de California en Santa Bárbara.

“Con los GPS, se pueden medir las tasas de movimiento hasta unos pocos milímetros por año- dijo Macdonald- y a medida que recibimos más y más mediciones con ese sistema, podemos tener una idea mucho mayor de lo que está sucediendo”. 

Las observaciones satelitales detalladas y combinadas con investigaciones de campo adicionales, también podrían ayudar a los científicos a reconstruir lo que está sucediendo bajo tierra en esa región, pero si el área es un laboratorio vivo para estudiar la grieta continental, el medio ambiente no lo hace fácil. 

“Se le ha llamado el Infierno de Dante”, dijo Cynthia Ebinger, geofísica de la Universidad de Tulane en Nueva Orleans, que ha llevado a cabo numerosas campañas de campo en la región de Afar, quien señala que la ciudad habitada más calurosa de la tierra está en Afar, donde las temperaturas diurnas a menudo alcanzan los 130 grados Fahrenheit y se enfrían a 95 grados templados por la noche”.

Fuego y agua

“Algunas de mis investigaciones en el campo se centraron en una grieta gigante de 35 millas que se abrió en el desierto de Etiopía, en 2005, y la división violenta fue equivalente a varios cientos de años de movimiento de la placa tectónica, en solo unos días”, dijo la geofísica Ebinger.

Y continúa: “Desde entonces, mi trabajo se ha centrado en lo que desencadena estos eventos extremos, porque el proceso de ruptura no siempre es suave y constante, ya que a veces puede definirse por intensas sacudidas del camino… estamos tratando de entender la gota que colma el vaso”, sentenció.

Ebinger explica que: “Con el tiempo, estos eventos divisorios remodelarán el continente africano, ya que cada límite de placa en la región Afar se está extendiendo a diferentes velocidades, pero las fuerzas combinadas de estas placas de separación están creando lo que se conoce como un sistema de cresta en el medio del océano, donde eventualmente se formará un nuevo océano”.

En esta nota, continúa explicando, el científico marino Macdonald que, “El Golfo de Adén y el Mar Rojo se inundarán en la región de Afar y en el Valle del Rift del oriente africano y se convertirán en un nuevo océano y esa parte se convertirá en su propio pequeño continente separado, ya que las 3 placas se separan a velocidades diferentes”,

El científico manifiesta que: “La placa árabe se aleja de África a una tasa de aproximadamente 1 pulgada por año, mientras que las dos placas africanas lo hacen más lentamente, entre media pulgada y 0,2 pulgadas por año”.

“Además – continúa – el proceso de ruptura puede estar ocurriendo a un ritmo glacial, pero los investigadores dicen que hay signos claros de que esta transición está teniendo lugar, ya que a medida que las placas se despegan, el material del interior de la tierra se mueve hacia la superficie y forma una corteza oceánica en las crestas y ya podemos ver que esta corteza está empezando a formarse, porque es claramente diferente de la corteza continental en su composición y densidad”, cerró Moore

Fuente: NBC News. Clarín

Compartir:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *