[Opinión] ¿Para quién juega el Papa Francisco?

Escribe: Cristina Pablos

Una pregunta innecesaria para una respuesta obvia.

El Papa es oposición siempre y cuando el pero-kirchnerismo no esté en el gobierno.

Hagamos un poco de memoria: cuando era el arzobispo de Bs. As. NUNCA un Kirchner fue a sus Tedeums para las fiestas patrias.

Hebe de Bonafini defecó en la catedral.

Incluso lo culpaban de colaborar con los militares durante el Proceso (como si el matrimonio K no lo hubiese hecho en Santa Cruz).

Una vez ungido Papa, todos los que lo denostaban cambiaron de idea (muy común en Argentina) y se cobijaron bajo su sotana.

Lo más cerca que estuvo de Argentina fue en Brasil, cuando les dijo a los jóvenes “hagan lío” (¿no se llama eso incitación a la violencia?).

Una vez Bergoglio en Roma, todos los K se peleaban porque los recibiera, cosa que él hacía gustoso porque, fiel a la doctrina de la Iglesia “hay que perdonar”.

A la primera en recibir fue a CFK. Mandó rosarios para todos los acusados de corrupción. Al único que no recibió fue a Massa ¿?

Se fotografió sonriente con un grupo de jóvenes portando una gran bandera de La Cámpora junto a otra gran bandera de los sindicalistas de Aerolíneas Argentinas.

En todas las fotos con la sonrisa de oreja a oreja, salvo cuando lo recibió a Macri y a su esposa.

Este año recibió a los líderes sindicalistas millonarios con trabajadores pobres.

Antes de recibir a su delegado de la Santa Sede en Argentina -Juan Grabois- había recibido a la ministro Sandra Pettovello pero no hubo foto.

Cuando se fotografió con Grabois y otros líderes piqueteros y de la economía popular no solo criticó a Bullrich, la ministro de Seguridad, por la “represión” a los jubilados, con palabras bastante fuertes sino que expresó un modelo contestatario al libertario.

Ante sus visitas el Papa dijo: “Se gastó el dinero en gas pimienta que es caro. No lo olviden”.

Agregó: “El silencio ante la injusticia abre paso a la división social y la violencia verbal a la física”. ¿Qué quiso decir?

No faltaron las críticas a Roca y su Campaña del Desierto diciendo que mataron a nuestros aborígenes.

Se ve que el Papa leyó la historia con un solo ojo. Le explico: Roca “expulsó” a los aborígenes chilenos (araucanos) quienes venían a violar y robar las mujeres de nuestros aborígenes (tehuelches) y su ganado y todo lo que tuvieran.

No sé si de no haber existido Roca la Patagonia sería argentina, pero es un tema para polemizar.

No nos olvidemos que los jesuitas -como el Papa- vinieron a “evangelizar” con la cruz y la espada.  

Qué lástima que el Papa no condene los crímenes de lesa humanidad que comete Maduro en Venezuela o las dictaduras de Cuba, Nicaragua y otras.

Tampoco se expresa sobre lo que está haciendo Putin en Ucrania o Hamas en Israel. Sus críticas son selectivas.

El Padre de la Iglesia Católica no se puede permitir hacer política desde su papel de Papa. Ud. es el líder de todos los que son creyentes.

Y, si después de más de 10 años de papado no quiere visitar a su país, Ud. sabrá por qué.