[Informe] La discriminación en Villa María: Cuestiones estéticas, redes sociales, escuelas y trabajo

Los resultados del mapa nacional de la discriminación elaborado por el INADI indicaron que un 72% de personas experimentaron discriminación, y los espacios donde más se discrimina son las redes sociales e internet y los ámbitos educativo y laboral. Las cuestiones estéticas encabezan el ránking. Villa María replica lo que acontece en la provincia y el país.

Escribe: Germán Giacchero       

              

La mayor parte de nosotros nos sentimos discriminados alguna vez. Los espacios donde más se experimentó esta situación fueron las redes sociales e internet, en primer término, seguido por los ámbitos educativo y laboral. Y los motivos se reiteran: cuestiones estéticas, ideológicas y de género, situación de pobreza, “personas gordas” (que aparece como una categoría diferente a cuestiones estéticas) y color de piel.

Son las principales conclusiones a las que llegó el mapa nacional de la discriminación en su tercera edición. El estudio fue elaborado por el Instituto Nacional contra la Discriminación la Xenofobia y el Racismo (INADI), junto con 23 universidades nacionales de todo el país.

Y, con algunas variaciones, presenta coincidencias entre las situaciones más recurrentes en las distintas provincias, tanto por el lado de los espacios más frecuentes como las razones de la discriminación. Córdoba no es la excepción y Villa María, aun con sus particularidades, tampoco.

Espacios de segregación

Los resultados arrojaron que un 72% de personas experimentaron discriminación, y los espacios donde más se discrimina son las redes sociales e internet en un 84%. Luego, le siguen, en segundo y tercer lugar, los ámbitos educativo, en un 79%, y laboral, en un 74%.

Los espacios donde más se discrimina son las redes sociales e internet en un 84%. Luego, le siguen, en segundo y tercer lugar, los ámbitos educativo, en un 79%, y laboral, en un 74%.

Ahí nomás se ubican ambientes como medios de comunicación y vía pública (69%), operativos de fuerzas de seguridad (68%), boliches y bares (66%), local de ropa y medios de transporte (61%).

“Lo novedoso es que las redes sociales e internet no son un espacio físico, sino virtual, lo cual resulta alarmante ya que se accede a él en cualquier momento y lugar, generando un espacio de intercambio de mensajes, opiniones, imágenes, propaganda política, etc., de manera constante”, advirtió en el documento la abogada Cintia Cravero, a cargo de la subdelegación del INADI en Villa María, desde octubre del año pasado.

Respecto a los casos en el ámbito educativo, analizó: “Pensar en estos números, rápidamente nos trae a la memoria las situaciones de acoso escolar que casi a diario son noticia en nuestra ciudad”.

Respecto a los casos en el ámbito educativo, analizó: “Pensar en estos números, rápidamente nos trae a la memoria las situaciones de acoso escolar que casi a diario son noticia en nuestra ciudad”.

“Entender la gravedad de las consecuencias del acoso escolar en cualquiera de sus formas (sexual, verbal, físico, social-aislar a la víctima o cibernético), nos abre camino para concientizar y concientizarnos que es un caldo de cultivo de actitudes discriminatorias, que van subiendo de tono, con el agravante de sufrirlo 24/7, porque ahora contamos con la facilidad que brindan las redes sociales, internet y el whatsapp que permite continuar ese acoso cualquier día a toda hora”, acotó la funcionaria.

Ante el acoso escolar y la discriminación, cómo debería actuar el estado.

Ámbitos de discriminación en la ciudad

En Villa María, la discriminación en el transporte público de pasajeros y las denuncias por acoso educativo por distintas cuestiones, pero sobre todo estéticas, lideran el listado de reclamos que llegan a la subdelegación del INADI en la ciudad.

“En transporte, siempre se da con las mismas empresas de colectivos, aunque trabajé muy bien con el Ersep y el CNRT (entes de control provincial y nacional). En los trayectos provinciales, (a quienes necesitan un asiento para discapacitados) se les pide que vayan a la terminal un par de horas antes, mientras que en los nacionales se pide la autorización con un código vía internet 72 horas antes”, explicó Cravero en diálogo con EL REGIONAL.

 “Muchas veces se encuentran con que tienen asignado un asiento en la parte de arriba, pero por su discapacidad no puede subir, o su asiento está ocupado. Ahí se obstruye el acceso a un derecho y es discriminación”, agregó.

Las otras denuncias frecuentes provienen de las escuelas públicas de la ciudad, por situaciones de acoso entre pares o entre docentes y alumnos, incluso hasta en el nivel terciario. “Denuncian los padres y los docentes en ocasiones. Las instituciones privadas son medio reacias a que una institución externa intervenga”, aclaró.

Hay muchísimo acoso escolar. Mucha gente no registra que padece una situación de acoso, están acostumbrados a eso y no lo perciben, hasta que algo cambia y acuden por ayuda.

“Hay muchísimo acoso escolar. Mucha gente no registra que padece una situación de acoso, están acostumbrados a eso y no lo perciben, hasta que algo cambia y acuden por ayuda”,

“El acoso viene del estereotipo de las personas y el hecho que alguien no encaje en los parámetros socialmente impuestos, color de piel, forma de vestir, barrio de procedencia, origen migrante. Allí también aparece la discriminación, el acoso social para hacerles el vacío para que nadie les hable y los dejen solos”, describió.

Para Cravero, la razón principal de la marginación en espacios escolares se vincula con lo estético, la apariencia, “porque no entran dentro de los cánones de belleza”. Precisamente, la causa número uno en la provincia de Córdoba y en gran parte del territorio argentino según el mapa de la discriminación.

Cravero apuntó que hay «muchísimo acoso escolar en la ciudad».

“Los acosadores o discriminadores no tienen un estereotipo. Es una relación de desequilibrio de poder, pero puede ser cualquier persona la que ejerce el acto discriminatorio. Incluso personas que estéticamente reflejan lo mismo que están discriminando”, remarcó.

Aspecto físico e ideología

Las cuestiones estéticas encabezan por lejos el ránking de tipos de discriminación sufrida en las distintas provincias. Situación de pobreza, es otra clase, junto con “personas gordas”, género, color de piel e ideología en menor medida.

“No hemos logrado romper con el paradigma de belleza que se nos ha impuesto fuertemente a través de distintos ámbitos, ni desde lo cultural o social, ni desde lo simbólico o lo legal (no se respeta la ley de talles, la mala utilización del derecho de admisión y permanencia, etc.)”, expresó la abogada.

“Tenemos un apego al desprecio de cuerpos no hegemónicos, aquellos que no se encuentren dentro de los estándares de belleza establecido por la moda y el sistema patriarcal capitalista, es digno de ser rechazado”, añadió.

Toda una curiosidad, Córdoba, a diferencia de otros distritos, presenta en segundo término a la discriminación por motivos ideológicos, detrás de las razones estéticas. En tercer lugar, recién sobrevienen las cuestiones de segregación por género.

“Con respecto al segundo lugar del podio, la ideología, hay que reconocer que el nivel de intolerancia que vivimos (fogoneado por la violencia y los discursos de odio que se replican a diario en las redes y en algunos canales de televisión) no ayuda a sobrellevar las diferencias ideológicas de una manera responsable”, analizó Cravero en el informe.

Según las edades

En relación con los grupos etáreos, la responsable local del INADI indicó que se puede observar que a medida que aumenta la edad, disminuye el porcentaje de experiencias discriminatorias.

Por caso, en el rango de 18 a 29 años, el 82% dijo haber padecido discriminación, mientras que entre quienes tienen de 60 a 74 años, solo el 53% respondió de manera afirmativa.

Pero, esto no significa que en la adultez no se sufra discriminación. “Las personas jóvenes han logrado incorporar el concepto de discriminación, de tal manera que pueden identificar cuándo una actitud la comprende”, subrayó.

Las personas jóvenes han logrado incorporar el concepto de discriminación, de tal manera que pueden identificar cuándo una actitud la comprende.

Cómo se trabaja

La sede villamariense del INADI procede de dos modalidades ante un reclamo o denuncia. “Hay situaciones donde se busca resolver en el momento para darle una solución a la persona, para ofrecer el acceso al derecho. Se llama gestión de buenos oficios”, dijo Cravero.

“Otras denuncias se receptan y se envían a la delegación de Córdoba, se pide una carátula a la sede central de Buenos Aires y se inicia el procedimiento. Se emplaza a la parte denunciada y se fija una audiencia de conciliación entre las partes siempre que sea posible”, detalló.

“Si no prospera, se emite un dictamen final que no es vinculante, es para determinar si hubo o no discriminación y se emiten una serie de recomendaciones. No hay sanción legal, pero la persona que denuncia puede ir por la vía civil por daños y perjuicios a partir de un acto discriminatorio”, aclaró.

La oficina local recepta una denuncia diaria en promedio, incluso durante los fines de semana, “cuando también atiendo mi teléfono”. Y la labor no es solo para Villa María, sino también para Villa Nueva y la región.

 “Me ha tocado abordar situaciones donde no solo había discriminación si no que corría peligro la vida una persona. Por eso, trabajo en redes con Fiscalía, Policía, Centro de Acceso a la Justicia”, finalizó la funcionaria.

La oficina del INADI en Villa María funciona en la Auditoría General (Chile 327). La línea de asistencia nacional es el número telefónico 168.

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