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[Argentinadas] Ciclistas, abstenerse: Cuidado con la “ciclismosis”
Escribe: Raquel Baratelli
En estos tiempos de ansiedad, las calles de las ciudades, de repente y sin previo aviso, sufren una repentina invasión de bicicletas de competición, conducidas por gente de todas las edades claramente no capacitada para pedales de semejante profesionalidad.
Tal es el grado de “ciclismosis” que experimentan las personas cansadas de no poder ir a gimnasios, de no enviar a los niños a la escuela, ni de hacerse un picadito por ahí, que han copado las bicicleterías hasta prácticamente exterminar los stocks de rodados y equipetes para la ocasión.
Han copado las bicicleterías hasta prácticamente exterminar los stocks de rodados y equipetes para la ocasión
Cual cardúmenes de moscas sin rumbo los grupetes de pedaleros salen a las calles como bola sin manija ocasionando situaciones verdaderamente espeluznantes para los conductores de autos y motos que deben transitar por la ciudad cuidándoles la vida.
Qué decir de los domingos, cuando la “ciclismosis” alcanza su estado más agudo y los pedaleros aparecen de la nada, zigzagueando como tropel de burros perseguidos.
Hasta las rutas se ven desbordadas de tipes sin entrenamiento, que pretenden trasponer el traste del sillón a la bici y en un esfuerzo sobrehumano, que se nota, recorren cincuenta kilómetros sin descanso.

Todo bien, chicos, hacer ejercicio es una causa noble, compartir esparcimiento con amigos y/o familia está buenísimo, hay que promover la tracción a sangre, pero ante la ausencia de bicisendas apropiadas, por favor, dígnense a trazar y memorizar un circuito antes de emprender su recorrido, improvisar sobre la marcha resulta en la necesidad de hacer señas con las manos o mandar mensajes por celular, para lo cual deben soltar el manubrio de la bici dificultando su correcta conducción.
No se aposten en grupo en la banquina a esperar a los rezagados, eviten mirar hacia atrás y/o dar indicaciones a sus niños, ya que no entenderán ni jota y su desorientación provocará un zigzagueo interminable en todos los miembros del grupo, anque de otros ajenos al mismo.
Recuerden que otros pedaleros están en la misma y que entre el casco, tapabocas (si los llevaran) y anteojos podrían equivocarse de grupo y terminar entre ciclistas de verdad, que lo llevarán hasta niveles insospechados de su resistencia.
Resumiendo: Sujeto pedalero, conduzca con precaución, sea responsable, mire hacia adelante, no pretenda recorrer más de lo que sus rodillas soporten, recuerde que hay que volver.
Cuide a su tropa.
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