[Suena Rock] El Barón Rojo, el as del aire en la guerra

“Hombre y máquina y nada allí en medio”

Escribe: Leo Muñoz

Guerra en el Aire

Durante la Guerra Franco-Prusiana aparece regularmente algo nuevo en los frentes de batalla, el globo aerostático. Fueron utilizados por los franceses en el asedio de París, enviando 66 en pocos meses, desde septiembre de 1870, para mantenerse comunicados más allá del cerco prusiano, apenas 6 fueron capturados.

De este modo cien personas salieron de París, se enviaron 2.500.000 cartas y palomas que regresaban a la capital con mensajes. Durante la Guerra del Paraguay los Aliados (Argentina, Brasil, Uruguay) usaron un globo aerostático para observar las líneas enemigas en 1867.

Caballeros del Aire

La Primera Guerra Mundial (1914-1918) fue el conflicto en el que nuevas tecnologías militares hicieron su aparición, entre ellas la aviación militar. Probados por los italianos en la campaña de Libia en 1911, desde 1914 los aviones en gran escala surcaron los cielos de los frentes de batalla.

Todas las naciones construyeron aparatos cada vez más potentes y rápidos, durante los años de guerra hubo 250 proyectos de modelos distintos y se fabricaron 16000 aviones.

Los duelos de los aviadores eran caballerosos, el objetivo era derribar al enemigo, hubo famosos ases de los países combatientes, Francesco Baracca de Italia, Edward Mannock de Inglaterra, entre otros, pero sin dudas el más famoso y recordado es el as alemán, Manfred von Richthofen, el “Barón Rojo”.

El Barón Rojo

El célebre as de la aviación alemana inició la guerra con 22 años, el uso de un pañuelo rojo cuando volaba derivó en que prontamente lo llamaran el “Barón Rojo”.

Se distinguió tempranamente en el frente francés al mando de la primera escuadrilla de caza alemana. Habitualmente se volaba en patrullas, elegían un avión enemigo y el as se lanzaba en picado para ametrallarlo, mientras el resto de la patrulla vigilaba.

Obtuvo en tres años 80 derribos, más que cualquier piloto en la Gran Guerra. Irónicamente su final fue por el arma de un soldado de infantería, aunque derribado por un avión canadiense, aparentemente volando confiado.

Murió el 21 de abril de 1918, no hay total acuerdo sobre como ocurrió su derribo y muerte.

“The Red Baron” (Sabaton)

Hombre y máquina y nada allí en medio.

El circo volador y un hombre de Prusia.

El cielo y un avión, este hombre manda su dominio.

El frente occidental y todo el camino a Rusia.

Muerte desde arriba, estás bajo fuego.

Teñido de rojo como la sangre, él está vagando más alto

Nació un soldado desde el caballo hasta los cielos.

Ahí es donde surgirá la leyenda.

Y él está volando

Más alto, el rey del cielo.

Está volando demasiado rápido y está volando demasiado alto.

Más alto, ojo por ojo.

La leyenda nunca morirá.

Primero en escena es una máquina letal.

Es abril sangriento y la marea está cambiando

Disparar a voluntad es la emoción de matar.

Cuatro en un día derribados con los motores encendidos.

Abrazar la fama, líder del escuadrón rojo.

Grita su nombre, Rote Kampfflieger

En el juego para ganar, un jugador tira los dados.

Ochenta aliados pagaron el precio.

Y él está volando

Más alto, el rey del cielo.

Está volando demasiado rápido y está volando muy alto.

Más alto, ojo por ojo.

La leyenda nunca morirá.

Más alto, el rey del cielo.

Está volando demasiado rápido otra vez está volando muy alto

Más alto, ojo por ojo.

La leyenda nunca morirá.

Mayor

Nació un soldado desde el caballo hasta los cielos.

Y la leyenda nunca muere.

Y él está volando

Y él está volando

Y él está volando

Más alto, el rey del cielo.

Está volando demasiado rápido y está volando demasiado alto.

Más alto, ojo por ojo.

La leyenda nunca morirá.

Más alto, el rey del cielo.

Está volando demasiado rápido y está volando muy alto.

Más alto, ojo por ojo.

La leyenda nunca morirá.

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